Si hacemos una pausa en nuestro día y reflexionamos sobre lo que nos gusta o lo que hemos hecho, podemos darnos cuenta si vivimos o solamente existimos.
Recién vi en Netflix la película “The Dig“, con Ralph Fiennes y Carey Mulligan, donde un grupo de arqueólogos hace un descubrimiento en la campiña inglesa, tratando de explicarse cómo vivió la gente de la época cuando se construyeron los hallazgos. ¿Cómo seremos recordados o interpretados por las futuras generaciones? ¿Qué palabras serán expresadas cuando nuestros nombres sean mencionados?
No morimos realmente, somos parte de algo continuo.
Ralph Fiennes, The Dig
Me recuerda un libro que leí hace un tiempo, llamado “The Lost, a search for six of six million”, de Daniel Mendelson. Es un libro basado en la investigación que hace el autor sobre unos tíos lejanos y sus hijas que fueron asesinados en Polonia durante el Holocausto; sin embargo, lo que lo hizo diferente para mi fue que al querer saber cómo habían muerto, el autor fue conociendo sus vidas, descubriendo quienes habían sido y cómo habían vivido.
Dejaron de ser una historia lejana para convertirse en memoria viva: tuvieron amigos, reían y bailaban en las fiestas, tenían sueños, se enojaban, las chicas adolescentes salían con amigos. Tan humanos como nosotros.
Seguramente has visto e escuchado de la película “The Soul”, creada por Pixar, donde se narra que todos tenemos un alma y que venimos a la Tierra con ciertas características personales (tipo Eneagrama), que nos permitirán vivir plenamente si seguimos nuestra pasión. Pero en ocasiones no nos sentimos lo suficientemente preparados, o hacemos a un lado lo que nos gusta por cumplir lo que creemos que nos dará estabilidad. ¿Vivimos o solamente existimos?
Un regalo que podemos hacernos es hacer un espacio en el día, detenernos y solamente observar: si estamos caminando, pararnos y mirar al cielo; o si estamos trabajando, dejar las manos quietas y verlas. Es un ejercicio de conciencia de estar presentes, aquí y ahora. Sabemos que lo único cierto es que estamos vivos hoy, en este momento.
Tengo presentes a personas que se han ido demasiado pronto, pero que me han enriquecido con su presencia, ejemplo y amistad mientras estuvieron cerca.
Pienso una palabra positiva de cada uno y honro su existencia recordándolos plenos, mientras vivo cada día dedicándome un espacio a escucharme y agradecer por la oportunidad de vivir.
Gracias por estar.
Muy buena reflexión.
Gracias por compartirla.
Me encanta leerte hermana querida!!
Sigue escribiendo que inspiras <3
¡Tú también me inspiras! xx
Gracias por esta reflexión, vivir conscientemente el aquí y el ahora 💕